El objeto de estudio de la criminología es la conducta antisocial y lo que envuelve, analizando el Crimen, al Criminal y la Criminalidad presente en un tiempo y espacio determinado con la finalidad de poder llevar un correcto diagnóstico y un pronóstico acertado que permita la solución al gran problema que actualmente aqueja a nuestro país. Durante años en la sociedad mexicana fue generándose un caldo de cultivo, teniendo como base la desigualdad entre la sociedad, lo cual produjo todas las condiciones necesarias para que la criminalidad desbordara a las instituciones desde hace 10 años con efectos devastadores, buscando una solución real desde hace 7 años.
Crimen
El crimen es la máxima representación de la conducta antisocial que ha perdurado desde épocas bíblicas, refiriendo que la primera infracción a una norma que se cometió en la humanidad, se encuentra descrita teológicamente, cuando los primeros habitantes de la tierra incumplieron con el mandato impuesto, siendo Adán y Eva los que tomaron y comieron el fruto prohibido, quienes fueron castigados con la expulsión del paraíso, además de condenar a su descendencia a sufrir en la vida terrenal; o cuando Caín priva de la vida a su hermano Abel, la muerte de Jesucristo o los magnicidios de personajes célebres como Julio César, Abra- ham Lincoln, J.F. Kennedy, Luis Donaldo Colosio o el más reciente Rodolfo Torre Cantú, hasta los homicidios comunes como el de Juan N o Pedro N, o los homicidios múltiples presentados por problemáticas de creencias religiosas, políticas, ideológicas, hasta las lesiones, violaciones, robos, asaltos, fraudes, daños, secuestros o en la actualidad los delitos cibernéticos, etc. Estos delitos han presentado características y condiciones específicas de acuerdo a la época, persiguiéndonos el crimen como la sombra persigue al cuerpo, ¿Pero qué fue lo que realmente los llevó a cometerlos?, ¿Por qué se actuó de una y otra manera?, son preguntas que nos hacemos y mejor aún, ¿Cuándo y cómo se logrará tener una sociedad libre de problemas delincuenciales?, ¿Cuál será la verdadera solución para erradicar el delito? ¿Qué antídoto existirá para curar este mal que nos aqueja y vulnera la seguridad de la vida, la salud o los bienes?
Actualmente el auge vertiginoso que presentaba la Criminología en los últimos 50 años, ha sufrido un estancamiento en cuanto a la aplicación objetiva de diagnósticos que auxilien a la sociedad en la solución de las problemáticas, encontrándose perdida en una abismo de teorías no comprobadas o poco prácticas.
Criminal
Al hablar del criminal observamos que los sujetos antisociales se pueden clasificar dependiendo de lo que los llevó a generar este tipo de conductas, además de la clasificación por tipo de delito, no llevándose a cabo la primera de las clasificaciones en los centros de internamiento para lograr así su reeducación o readaptación, lo que no beneficia en el tipo de tratamiento, al no poder realizar así un plan individualizado de profilaxis, adecuado que ayude a la reinserción social del individuo.
Primera clasificación de sujetos antisociales:
- Los que fueron víctimas de agresores
- Los que cometen delitos por sentimiento de poder
- Los que se encuentran bajo influjo de sustancias tóxicas
- Los que realizan el delito como para subsistir
Criminalidad
La criminalidad que nos aqueja, ha llegado a vulnerar las instituciones del estado al haberse visto copadas por parte de la delincuencia organizada, observando una debilidad estructural, la que en 7 años no ha sido capaz de poder terminar con la violencia desbordada que ha generado más de 100,000 muertos y 25,000 desaparecidos en nuestro país, dejando miles de familias en duelo ya sea por la muerte o por la desaparición de un ser querido; ¿Pero criminológicamente, qué ha generado la descomposición del tejido social mencionada durante el anterior sexenio?
(Fragmento del artículo que se publica en NOVUS FUNERARIO Nº6, ya en circulación)
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