Se deben tener cuatro factores importantes para saber cómo se llevara a cabo un embalsamamiento:
- Tomar en cuenta las condiciones generales del cadáver.
- Saber si cuenta con alguna consecuencia por alguna enfermedad.
- Tener conocimiento de los medicamentos o procedimientos quirúrgicos que la persona hubiera tenido.
- Consecuencias del tiempo entre la defunción y el embalsamamiento.
Con esto se entiende que el embalsamador debe aprender a analizar las condiciones en que se encuentra al cadáver para poder llevar a cabo un embalsamamiento con éxito.
Para llevar a cabo este análisis del cadáver el embalsamador puede basarse en ver, oler o tocar, es importante que siempre se estén enterados de las causas de muerte, así como que medicamentos se le administraban en su caso, si hubo algún procedimiento quirúrgico, autopsia, refrigeración, cambios post mortem, todo esto es importante para saber cuál sería el procedimiento para el embalsamamiento del cadáver.
Hay otras fuentes de las cuales se pueden tomar información como:
- Certificado de defunción.
- Afecciones infecciosas o contagiosas del difunto informadas por el centro médico.
- Información relacionada con la ubicación y la fecha de la observación y disposición final del cadáver.
- El traslado a un lugar fuera del país para saber que tratamientos de embalsamamiento y preparación de formularios específicos.
- Solicitudes de los familiares de cómo vestir y arreglar el difunto, así como retiros de dispositivos médicos.
Dentro de las condiciones generales del cadáver también se deben considerar los siguientes aspectos:
Edad:
En niños o bebés, como tienen arterias y venas delgadas, se necesitará instrumentales más pequeños así como tal vez soluciones más suaves. En personas adultas las dificultades pueden ser arteriosclerosis, falta de dientes, prótesis dentales, etc.
Peso:
Demacración: en deshidratación puede ser necesario reducir las concentraciones de soluciones ya que puede haber inconvenientes en el cierre de ojos y boca.
Obesidad: la mejor inyección será la arteria carótida primitiva y drenación por yugular interna.
Musculatura: el adulto sano con piel firme y musculatura bien desarrollada las soluciones pueden tener firmeza en los tejidos, si existiera un retraso entre la defunción y el embalsamamiento se puede presentar un rigor mortis intenso que dificultará la distribución del químico, si por el contrario los músculos no están desarrolladas y la piel este flácida se puede esperar que los químicos causen endurecimiento mínimo o nulo en la extremidades. En este tipo de tejidos no asimila las soluciones tan bien como un tejido sano.
Procesos de enfermedades:
Si no se conoce la causa de muerte, el embalsamador puede observar el cadáver, por ejemplo si una persona padecía ictericia, no le debe preocupar que la causo sino las condiciones en que se encuentra el cadáver por esta enfermedad.
El embalsamador debe aprender a conocer las condiciones de los efectos que puedan ocasionar ciertas enfermedades en el cuerpo, teniendo en cuenta esto el éxito del embalsamamiento será positivo.
Tratamientos farmacológicos y procedimientos quirúrgicos:
Hay que tener en cuenta que un medicamento no siempre tiene el mismo efecto en una persona, el embalsamador tiene que observar las condiciones del cadáver y no efectos de un medicamento en específico.
Algunos efectos que puedan complicar el embalsamamiento son: ictericia, decoloraciones como purpura y equimosis, edema, dificultad para establecer la firmeza de los tejido, pérdida de cabello, hemorragia interna, insuficiencia renal, cambios en las paredes de las células e inflamación de los tejidos faciales.
Tiempo:
Este análisis se considera el intervalo de tiempo que existe entre la defunción y el embalsamamiento, es uno de los primeros puntos que se debe tener en cuenta para realizar el procedimiento, posterior a esto se consideran las condiciones generales del cadáver.
En general para obtener un buen resultado de embalsamamiento es el que se lleva acabo tan pronto sea posible después de la muerte de la persona.
Existen tres condiciones después del fallecimiento que más obstaculizan la distribución de las soluciones arteriales:
- Coagulación de la sangre.
- Rigor Mortis.
- Descomposición
Si se pueden evitar estos efectos los resultados del embalsamamiento serán los mejores.
Bibliografía
- Mayer, Robert. (2012) Embalsamamiento, Historia, Teoría y Práctica (Quinta edición), Editorial Mcgraw-Hill Companies.