Restauración es la acción de reparar o reconstruir aquellos desperfectos de una obra de arte.
La restauración se puede considerar en aquellas anomalías que se presentan en el cuerpo humano, ya sea por traumatismos, malformaciones congénitas, tumoraciones, etc., en el caso del embalsamamiento lo más común que se usa para este tipo de restauraciones es el uso de la cera y se emplean instrumentos o implementos como gasas y espátulas, al final se aplica el maquillaje.
Se dice que el rostro es el espejo del alma, es decir, es nuestra presentación la que expresa nuestras emociones las cuales son difíciles de disimular, así como algún defecto o imperfección que podamos tener en nuestro rostro, es aquí donde puede entrar la reconstrucción facial la cual su objetivo es mejorar el aspecto externo logrando la corrección de estos defectos.
Parte de la historia de la reconstrucción nos indica que es una práctica que se ha venido realizando desde más de 3500 años, de acuerdo a un registro de un papiro en la antigüedad Egipcia indican que las heridas eran tratadas con pegamentos, con taponamientos de fibra de lino el cual era un absorbente por lo cual era ideal para dichas heridas ya que podía absorber toda la humedad.
Existieron diversos hilos de sutura que se usaban en diversas regiones y épocas:
- Arabia (año 900 a.C), usaban hilo llamado catgut, era un hila absorbente el cual obtenían del intestino del gato.
- En la India (años 600 a.C), ellos usaban algodón, cuero y el crin de caballo.
- En la Edad Media en esta época se usaban los hilos de seda.
- Edad Moderna, para esta época los avances se vieron presente creando hilos de propileno, suturas absorbibles, suturas hipoalergénicas, suturas para cada tejido, etc.
Al Médico Tagliacozzi (1545 o siglo XVI) se le consideró como al padre de la cirugía plástica, él se refería a la cirugía como aquello que servía para reponer lo que la “naturaleza había concedido, pero la que la mala suerte lo había deteriorado”. Fue un médico que ayudó mucho para el estudio y práctica de esta actividad.
Dieffenbach en 1845, inicia cirugías con aquellos fx de nariz o alteraciones en su forma para poder darles una mejor calidad de vida a las personas.
En los años 50´s se inicia la revolución de la cirugía reconstructiva y restaurativa (microcirugías, injertos, colgajos, revascularizaciones, etc).
La realización de las cirugías será llevada a cabo de acuerdo a la deformidad de cabeza y cara, es decir tendrá mucho que ver el tipo de imperfecciones y claro del estado de la persona, a este tipo de cirugías se les da el nombre de reconstrucción craneofacial; cirugía craneofacial orbitaria y/o reconstrucción facial.
Para el ámbito forense la reconstrucción facial no es más que el medio utilizado en el cual se usan materiales moldeables sobre el rostro o cráneo para poder brindar la reconstrucción necesaria. Este método permite aproximarnos a la fisionomía de los tejidos blandos, lo que facilitará la identificación y es útil tanto en ciencias forenses como en arqueología y paleobiología (Gerasimov, 1971; Gatliff, 1984; Krogman & Iscan, 1986; Prag y Neave, 1997).
Otros métodos permiten una reconstrucción sobre un plano bidimensional, como imágenes fotográficas y radiográficas. Cualquiera sea el método empleado estos deben conjugar el reproducir adecuadamente las estructuras anatómicas subyacentes, junto con respetar las características del tejido blando facial, la presencia de dimorfismo sexual y su comportamiento población específico (Suazo et al., 2008a; Suazo et al., 2008c; Suazo et al., 2008d; Suazo et al., 2009).
Para ayudar a la reconstrucción se basan en el hueso, el cual es un soporte rígido en el cual se encuentran los tejidos blandos que ayudan para las técnicas de la reconstrucción facial, pero hay que tomar en cuenta que los tejidos duros y blandos se transforman con el transcurso de la vida, he aquí la importancia de los huesos ya que es el que determina la forma, existen autores que indican: que un cráneo intacto o bien reconstruido es un buen soporte para el modelado de las partes blandas. El problema surge en ciertas estructuras que estando contenidas en cavidades óseas o tomando soporte en hueso varían considerablemente en los sujetos vivos, como los bulbos oculares, el pelo, la nariz y las orejas. (Bernarda López, Schilling, J., Suazo Galdames, I.,2010).
Referencias
Bernarda López, Schilling, J., Suazo Galdames, I., (2010) Evaluación de los Métodos de Localización del Punto Pronasal para la Reconstrucción Facial Forense. Recuperado: https://scielo.conicyt.cl/scielo.php?pid=S0717-95022010000400031&script=sci_arttext
Reconstrucción de la cabeza y la cara (sin fecha) Recuperado:
https://medlineplus.gov/spanish/ency/article/002980.htm