Desde los años 50’s en Nueva York, existía una ley estatal que impedía a las funerarias servir cualquier tipo de alimento o bebida, incluyendo agua.
Sin embargo, como lo comenta David Parente, director de Funeraria McVeigh: “Las preferencias de los ciudadanos del Estado de Nueva York han cambiado desde la década de 1950”.
“Siempre hemos evitado que la gente tenga comida y bebida en la funeraria, pero la mayoría de las familias se desconciertan cuando se enteran de la ley»
– Stephen Gans, Funeraria albany.
Hoy en día, Nueva York cuenta con un proyecto de ley firmado por el Gobernador Andrew M. Cuomo y respaldado por la Asociación de Directores Funerarios del Estado de Nueva York, poniéndole así, fin a décadas de prohibición que impedía a las funerarias ofrecer un servicio de cafetería.
Esta ley permite trabajar en conjunto con restaurantes o servicios de comida para ofrecer alimentos clasificados como “incidentales”, tales como productos de panadería, bocadillos y platos de aperitivos junto con bebidas no alcohólicas.
Los principales argumentos de los funerarios para ejercer presión en la aprobación de esta ley están en que el alimento puede ejercer un vínculo para la memoria convirtiéndose así, en una parte importante en el ritual donde se recuerda o celebra una vida, además del claro servicio que ofrece la alimentación y bebida.
Con este nuevo cambio, los funerarios de Nueva York esperan poder ofrecer un servicio más completo en ese momento tan difícil para sus clientes.
Esta nueva legislación entrará en vigor en un periodo de seis meses y permite a Nueva York unirse a otros 48 estados que cuentan con este privilegio.
Consulta la ley y su proceso aquí.